"Los años más felices"

¿El mejor año de toda mi vida?¡Cómo dudarlo! El mejor año de mi vida fue mi primer año en el instituto, cuando todavía me llevaba con mis antiguos amigos del colegio, cuando empezaba a conocer a los que ahora son mis amigos, a mi señorito, mi gemelo, y sobretodo, porque ese fue el año en el que lo conocí. El año en el que surgieron todos esos sentimientos que no sabía que podrían salir de mi. Y ahora, que por fin te he olvidado, que no hay nada entre tu y yo, ni siquiera rencor, ahora que eres feliz con tu pareja, no sé por qué eres la mayor fuente de inspiración para mis textos. Tu novia es afortunada por tener lo que yo nunca tuve de ti, tu corazón, tus labios entre sus labios, tu piel junto a su piel... Pero no por ello me siento triste, no ahora, porque he de admitir que hace unos años, cuando una de tus parejas logró contactar conmigo, dios sabe como, me enfureció mucho, llegando hasta a pensar que lo habías hecho tú para burlarte de mi, sabiendo ya todo lo que sabías. Pero eso es el pasado y no por ello me voy a enfadar, además ahora no tengo razón para enfadarme, puesto que ahora siento algo muy grande por otra persona, a la que conocí mi segundo año en el instituto, muchos de mis mejores recuerdos, que aunque todavía no me había fijado en él de ese modo porque seguía ciega por otro,, ya su belleza, (que otros por cierto niegan), empezaba a llegar poco a poco desde mis ojos hasta mi corazón y mi estómago, que aunque fisiologicamente están muy lejos. Sentimentalmente son casi uno, hecho que muchas veces me he llegado a provocar nauseas.

"Amor a primera vista"

              Un día que te vi pasar, y cuando aún no te conocía, me di cuenta que eras la estrellita más linda, que brillaba más que el propio Sol y esa luz fue lo que me hizo caer inmediatamente rendida a tus pies, quedar enredada en tus redes.
              Cada vez que oigo esa melodía,esa canción, tú, la flor más bella de todo el campo, el tulipán más hermoso de Holanda, vienes a la velocidad de la luz, como un soplo de aire fresco, que penetra en mi mente, haciendo que ésta se quede en blanco y sea incapaz de concentrarme en algo, algo que no seas tú.
              Recuerdo esas tardes en las que me paso caminando sin rumbo fijo buscando un huequecito en tu corazón, intentado no romperlo a cada paso que doy, porque no puedo ni concentrarme en estudiar.
              Y también recuerdo las fantasías en las que me sumerjo por las noches cuando leo esos libros de amor almacenados en una vieja estantería junto a otros muchos que ya me he leído y muchos que me quedan por leer, poniéndonos a ti y a mi como personajes, sintiendo cada uno de los pasos de los protagonistas como si fueran reales, como si todo lo que relatan ahí nos pasara a nosotros, solos tú y yo.
              Despierto, porque si sigo soñando tantas tonterías llegará el día en que me caiga de la cama y no sea capaz de ver la realidad tal y como es y eso sería ya muy tarde.

"Te quiero para mi"

             He de admitir que soy muy posesiva con las cosas que realmente quiero. No es agradable ver a la persona que amas cogida de la mano o besándose con otra, pero como dice el dicho "Si amas a alguien déjalo ir y si te quiere, volverá".

             ¿Acaso es tan malo sentir "celos" de la persona que está viviendo con tu amado tus sueños? Yo creo que no, porque dentro de todo el mundo están los celos y llega un día en el que tienen que estallar y liberarse el monstruo interior que te come por dentro cada una de tus células, matándolas poco a poco hasta que te quedas totalmente hueco.

             ¿Acaso es malo quererte solo para mi? Los sueños, sueños son y por soñar no pasa nada y quizás esos sueños algún día, por arte de magia, se hagan realidad y así convertirme en una risueña jovencita.

             Pero como todavía no son reales tengo que conformarme con mirarte desde lo lejos y dejar que los hechos fluyan como la lava tras la erupción del volcán de la imaginación y de la pasión. Verte reír las bromas de los demás, con una sonrisa simuladamente falsa que no expresa el dolor que recorre mi cuerpo de la cabeza a los pies, haciendo parecer que soy la tía más feliz del mundo aunque se me estén comiendo el estómago y haciéndome morir lentamente, para que tenga que soportar todo el dolor, de principio a fin.

             Me gustaría sostener tus manos entre las mías, utilizar el calor que desprende tu cuerpo tras un abrazo. Anoche, mi sueño fue que al preguntarte si alguna vez me darías una oportunidad, tú me preguntaste que si quería que me contestaste con la verdad o que me dijeses una mentira, e incrédula de mi que al responderte que prefería una mentira esperaba que me dijeras que sí(al ser una mentira, eso significaría lo contrario), épica  fue mi cara al oír que NO me darías una oportunidad(eso significaría que sí). Justo al despertarme y darme cuenta que era un sueño apareció esbozada en mi cara una inocente sonrisa. ¡Qué tierno sueño!¡Desearía no haberme despertado nunca! Pero tengo que ser realista y darme cuenta de que es solo un sueño, por lo que me tendré que conformar con mirarte desde lo lejos y al pasar por delante de ti, guardarme las ganas de gritar y hacerlo por dentro y sonreír como una tontita enamorada, que es lo que soy.

"Pequeña Cenicienta"

                 Por unos minutos, me ha dado por volver la vista atrás, a esa época en la que era una jovencita enamorada del que creía que iba a ser su príncipe azul, con el que iba a cabalgar en un hermoso caballo blanco de doradas crines hasta la entrada de un inmenso castillo al que la entraría en brazos, quizás porque acababa de salir de esos años en los que a las niñas nos tocaba ver a las princesas de Disney y desear tener un romance de película. Pero esa época ya pasó, ya me he hecho a la idea de que los cuentos de hadas madrinas que vienen para convertir tus ropas de sirvienta en un bello traje de fiesta con zapatitos de cristal para ir guapa al baile del príncipe en palacio y la carroza tirada por caballos que se desvanecen a medianoche, no son reales, que en la vida las cosas no son tan fáciles.
               No sé por qué cada vez que los recuerdos, los viejos recuerdos de un pasado no muy lejano, de lo que por ti sentí, vienen a mi mente y las palabras fluyen a través de mis dedos para que la tinta de este simple bolígrafo las exprese. Las palabras recorren mi cuerpo como un río para acabar estallando sobre el papel.
              No entiendo muy bien el por qué de que ésto me pase contigo, si se supone que ya por ti no siento nada. Quizás sea porque fue mucho el tiempo en el que sentí un amor muy fuerte dentro del pecho que me lo aprisionaba hasta el punto de no dejarlo latir con naturalidad y todavía, quizás, queda un pequeño resto de esos sentimientos dentro de mi que me permiten hacer surgir estas palabras.
             Me hace mucha gracia ver en que clase de persona nos hemos convertido tras casi cinco interminables años, que ya somos dos personas grandes que han llevado adelante sus respectivas vidas, muy felices con nuestros amigos, saliendo por ahí para divertirnos.
            Siento que aunque nuestras vidas hayan seguido distintos caminos, algún día, quizás vuelvan a unirse en otras circunstancias.